Este evento profundizó en una temática de trascendental importancia: la seguridad ciudadana en el hemisferio, la nación, el departamento de Cundinamarca y la región metropolitana. Además, fueron abordados temas como el crimen transnacional organizado y su influencia en delitos internacionales organizados, así como en las dinámicas criminales en Colombia.
El encuentro académico fue dividido en tres etapas: la primera se denominó «Panorama de la seguridad ciudadana en el mundo, el hemisferio, la región y la ciudad»; la segunda, «Seguridad ciudadana en Bogotá», y la tercera, «Prospectivas y conclusiones».
En el primero momento, el rector de la Universidad Militar Nueva Granada (UMNG), mayor general (r) Javier Alberto Ayala Amaya, se refirió durante su intervención a la transversalidad de la seguridad multidimensional: «Las instituciones, las empresas privadas y absolutamente todos los organismos del Estado deben contribuir para que el concepto de seguridad multidimensional pueda realmente tener un ejercicio o un eje transversal que permita los objetivos comunes. Más en un momento circunstancial, cuando la amenaza migra a unos entornos [que] la sociedad humana tal vez no calculaba, y entre ellos comparto el ámbito de la seguridad direccionada al ciberespacio. Ahí tenemos, de alguna forma, un gran reto para las fuerzas de seguridad, porque debemos entender que el cibercrimen, el ciberterrorismo y todo aquello que en ese espacio virtual del ciberespacio se está dando, pues impacta a la humanidad, impacta sin lugar a dudas al Estado, a la ciudad, a las administraciones, al mundo empresarial, a la familia, al ser humano en su dignidad, en sus circunstancias de privacidad, y por ello este es un reto extraordinario».
Así mismo, el embajador de Finlandia en Colombia, Antti Kaski, basó su intervención en los conceptos que se aplican en ese país para combatir la criminalidad: «Las buenas prácticas de gobierno, que son abiertas y transparentes, se rigen por la ley, fomentan la participación activa de los ciudadanos, ponen las bases sobre las cuales elaborar las respuestas, tanto estatales como no estatales, a los retos criminales. Una gobernanza democrática puede ser flexible para adoptar nuevas medidas. Hace tiempo que las situaciones de conflicto y fragilidad se consideran factores que contribuyen a la criminalidad. Cuando la guerra es el tema prioritario en un país, los recursos se redireccionan y, por ende, las instituciones se debilitan. El colapso de las estructuras de gobierno, el debilitamiento de los grupos de seguridad, la limitación del acceso a los servicios básicos ofrecen un terreno fértil para que operen los grupos criminales».
El seminario cerró con una sesión de reflexiones y conclusiones en la que participaron cinco docentes de la Facultad de Relaciones Internacionales, Estrategia y Seguridad de la UMNG y que fue moderada por el brigadier general (r) Juan Carlos Buitrago Arias. Durante esta última etapa se recopilaron los conceptos de seguridad tratados durante el seminario, y la principal conclusión compartida fue la necesidad de implementar políticas públicas efectivas, invertir el capital de investigación social en la problemática analizada y luchar contra la corrupción dentro de las instituciones del Estado.
